miércoles, 15 de octubre de 2008

Cosas que odio, y seguro que me dejo muchas



La gente que dice "no me gustan los gatos porque son muy traidores".
Los lugares comunes, las frases hechas.
La falta de ilación lógica.
La gente que se cree muy evolucionada porque le reza mantras al universo.
La gente que me aburre.
La gente lerda y tarda. Los imbéciles en general. Abundan, oh, sí.
El café.
El olor a sobaco guarro.
La gente que dice "los animales sí que son civilizados, no como las personas".
La gente que se cree muy culta porque escribe una mierda de poemas.
Las rastas. Sobre todo si además llevan los parietales afeitados.
Las puestas de sol sobre el mar.
La gente que fotografía puestas de sol sobre el mar.
Los médicos que insisten en que se les llame doctor. Aunque tengan un doctorado.
La gente que hace ruido al masticar chicle.
La gente que mastica chicle.
La gente que escupe en la calle.
La gente que es "muy amiga de sus amigos".
Telefónica.
Las conversaciones de ascensor. Hay que empezarlas siempre con un "pues esta mañana he envenenado a mi abuela..."
Amaral, Maná y la Alonsa. Por ese orden.
La gente que no sabe beber.
La gente que no sabe potar.
La gente que me debe dinero.
La gente que le da propina al de telepizza. Lo que hay que darle es la bolsa de basura y que la baje al contenedor, que le va de paso.
Los jerseys de cuello cisne. Otra cosa son los jerseys de cuello alto.
La gente más inteligente que yo: Rai, te odio.



Actualización a 20 de octubre:

Sí, leñe, tenéis razón, son los temporales, pero también he visto rastas colgando de occipucios anejos a parietales afeitados.

BE, a ti también te odio. ¿Ya estás contento?

¡Y que nadie se meta con mi cerdito Sub!

jueves, 2 de octubre de 2008

Deep though, secretos de la naturaleza desvelados




Si el tabaco fuera tan malo, en mi casa no habría moscas.